Uno de los grandes problemas a los que nos enfrentamos hoy en día es el cambio climático. En el mundo se han aprobado varias resoluciones con metas ambientales, pero hoy Dinamarca hace historia en esta cuestión, aprobando un impuesto sobre el ganado.
A partir de 2030, Dinamarca cobrará un impuesto especial para los propietarios de vacas, ovejas y cerdos; este impuesto se basa en las emisiones de metano liberadas por los animales.
Puntos Clave
- Impacto ambiental: El metano, un gas de efecto invernadero potente, se libera principalmente a través de los eructos y las flatulencias de las vacas. Dinamarca se une así a otros países en sus esfuerzos por regular estas emisiones.
- Impuesto inicial: Inicialmente, el impuesto es de 300 coronas danesas (aproximadamente 43 dólares) por tonelada equivalente de dióxido de carbono.
- Aumento gradual: Para 2035, el impuesto aumentará a 750 coronas danesas (alrededor de 108 dólares).
- La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) estima que las 1.500 millones de vacas en todo el mundo destinadas a la producción de alimentos para el consumo humano liberan aproximadamente 100 millones de toneladas de metano al año. Esto equivale a 2,500 millones de CO2.
- En general, la contribución de la ganadería bovina al calentamiento global es del 10%, y solo la mitad de esta cifra se atribuye a los estómagos de las vacas.
¿A dónde va el dinero?
Como parte de esta resolución, el gobierno de Dinamarca también aprobó planes ambientales con un costo total de 3.7 billones de dólares. Estos estarán centrados en reforestación.
Estas medidas y otras buscan que el país sea neutro en sus emisiones para el 2045.
Otras soluciones
No solamente se busca reducir las emisiones causadas por el ganado, otra de las soluciones es crear alternativas al consumo de cárnicos, como dietas basadas en vegetales. Claro, estas alternativas aún están muy lejos de las masas, pero han mejorado mucho.
De la manera que sea, esperamos que mañana podamos vivir en un mundo más verde.
