Una tragedia en el ámbito laboral ha conmocionado a la sociedad. La vida de un hombre trabajador, conocido por su humildad y dedicación, terminó abruptamente a causa de una cruel «broma» de sus propios compañeros. Esta historia, que se desarrolló en Torreón, Coahuila, ha desatado una ola de indignación y un ferviente llamado a la justicia. El caso de Carlos Gurrola, «Papayita», no es solo la narración de un suceso lamentable, sino un crudo recordatorio de las devastadoras consecuencias del acoso y el maltrato en el lugar de trabajo.
¿Qué le pasó a Carlos Gurrola, «Papayita»?
Carlos Gurrola, un hombre de 47 años conocido cariñosamente como «Papayita», acudió al supermercado HEB de México en Torreón, Coahuila, como lo hacía cada día. Él trabajaba como personal de limpieza y era el único sustento para su familia. Sin saber que una pesadilla le esperaba, dejó una botella de electrolitos en su casillero, un pequeño respiro de frescura que lo acompañaba en su jornada. Al regresar por su bebida, la encontró, pero alguien, con una intención maliciosa, le había puesto desengrasante en ella. Papayita tomó el líquido tóxico sin sospechar nada, creyendo que se trataba de una broma pesada de sus compañeros de trabajo. La acción, que sus colegas consideraban un chiste, desencadenó una agonía de casi tres semanas para el hombre.
El era Carlos Gurrola Arguijo, conocido como “Papayita”, perdió la vida después de haber ingerido desengrasante colocado en su bebida por "compañeros" mientras trabajaba en el área de limpieza de un centro comercial.
— LA GRAN SUGARITA 💛✨ (@CarneDeAzucar) September 19, 2025
Tenía 47 años, y ya había denunciado ser víctima constante de… pic.twitter.com/vwf5zVbc2S
Inmediatamente después de tomar la bebida envenenada, Papayita se sintió mal. El líquido corrosivo le causó una grave intoxicación que le quemó por dentro. Sus pulmones, riñones, garganta y lengua resultaron severamente dañados. Sus compañeros, al ver que la «broma» no había salido como esperaban, llamaron a los servicios de emergencia. Carlos fue trasladado de inmediato a la Clínica 71 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Allí, pasó 19 días en estado crítico, aferrándose a la vida, mientras su cuerpo luchaba por sobrevivir al veneno que lo consumía. Su familia, impotente, lo acompañó durante su agonía, rezando por un milagro que tristemente no llegó. El 18 de septiembre, después de una larga y dolorosa batalla, Papayita falleció, dejando a sus seres queridos sumidos en el dolor y la impotencia.
¿Sufría Carlos Gurrola, «Papayita» de acoso laboral?
La muerte de Carlos Gurrola no fue un evento aislado. Su familia reveló que él había sido víctima de acoso laboral constante y bullying por parte de sus compañeros. Ellos lo humillaban y le jugaban bromas de muy mal gusto, aprovechándose de su origen humilde. Le pinchaban las llantas de su bicicleta, le escondían su celular, le robaban su almuerzo e incluso le robaron la bicicleta. Papayita soportaba en silencio las humillaciones, porque necesitaba su trabajo para mantener a su familia. Su trabajo, que él veía como un medio para proveer, se había convertido en un infierno. Él vivía con miedo y con la ansiedad de ser el siguiente en ser humillado. Lo que empezó como bromas de mal gusto, escaló hasta convertirse en un ataque brutal y mortal. La familia de Papayita ha hablado abiertamente sobre el constante abuso que él sufrió, pintando un cuadro de un ambiente laboral tóxico y peligroso. La tragedia no ocurrió en un vacío; fue el resultado de un patrón de maltrato y falta de respeto.
POR UNA ESTÚPIDA "BROMA" DE SUS COMPAÑEROS DE TRABAJO, MUERE CARLOS GURROLA, “PAPAYITA”
— ▕⃝⃤ Alquimista▕⃝⃤ (@Librattus) September 20, 2025
Carlos Gurrola, un hombre de trabajo, respeto y humildad, perdió la vida después de 19 días de agonía en el hospital. Tenía 47 años y se ganaba la vida como trabajador de limpieza en Torreón.… pic.twitter.com/j4bBGsxeLb
¿Qué ha hecho la empresa HEB y la compañía de limpieza ante el asesinato de Carlos Gurrola?
El caso de Carlos Gurrola ha puesto a las empresas involucradas en el ojo público. El supermercado HEB, donde ocurrió la tragedia, emitió un comunicado oficial. En el documento, la cadena de supermercados afirmó que colabora de cerca con las autoridades para esclarecer los hechos. Sin embargo, HEB de México, también señaló que Carlos Gurrola trabajaba para una empresa externa, Multiservicios ROCASA, la compañía encargada de los servicios de limpieza en la tienda. HEB de México buscó distanciarse del incidente, colocándolo como un asunto entre empleados de otra compañía.
Multiservicios ROCASA, por su parte, rechazó de manera categórica la versión de la familia. La empresa negó que Carlos sufriera de acoso laboral y afirmó que su ambiente de trabajo era seguro y respetuoso. Esta versión de los hechos contradice directamente el testimonio de la familia de Papayita, quienes han detallado una larga historia de humillaciones y agresiones. La negativa de la compañía a reconocer el acoso ha generado más indignación y ha impulsado a la familia a seguir luchando por justicia. Ellos afirman que la empresa no ha asumido su responsabilidad y está intentando encubrir la verdad de lo que le pasó a su familiar.
¿Quién era Carlos Gurrola y por qué exigen justicia?
El pasado fin de semana, la comunidad despidió a Carlos Gurrola, «Papayita», con un funeral lleno de dolor y rabia. Era un hombre humilde, un padre de familia que solo buscaba proveer para los suyos. Su muerte, tan injusta y cruel, ha movilizado a muchas personas que no lo conocían, pero que se identificaron con su historia. Grupos de activistas y ciudadanos en general se han unido a la familia en su exigencia de justicia. Claman que la persona o personas que concibieron y ejecutaron la broma cruel y mortal paguen por su crimen. La muerte de Carlos no puede quedar impune. Su caso se ha convertido en un símbolo de la lucha contra el bullying laboral y un llamado a la sociedad para que no permita que la crueldad y la indiferencia se salgan con la suya. Papayita no merecía este final, un final que lo privó de su vida y de su futuro por una broma de muy mal gusto. Su memoria, y el clamor de justicia de su familia, resuenan con fuerza en todo el país.
Estoy en el Plantón afuera de HEB, exigiendo justicia por el homicidio de Carlos Gurrola “El Papayita”. No fue una broma, fue violencia que le arrebató la vida.
— LuisShots (@Peter_sr97) September 21, 2025
No podemos normalizar el acoso ni el maltrato disfrazado de juegos.✊#Heb #Torreon #JusticiaParaCarlosGurrola pic.twitter.com/buB6bZ7YBm
La Fiscalía de Coahuila ha tomado cartas en el asunto. Han abierto una carpeta de investigación para esclarecer los hechos y encontrar a los responsables. La autoridad ya solicitó a HEB de México, las videocámaras de seguridad de la tienda, con la esperanza de que las grabaciones capten a la persona que puso el desengrasante en la bebida de Papayita. Además, los investigadores han recabado entrevistas con los compañeros de trabajo de Carlos, buscando pistas y testimonios que los conduzcan a la verdad. La Fiscalía ha declarado que no descansará hasta que los culpables de este acto atroz enfrenten a la justicia. La comunidad de Torreón y la familia de Carlos esperan que la investigación sea rápida y transparente.