Después de semanas de rumores, portazos y planes B, Matías Almeyda es entrenador del Sevilla. El argentino, de 51 años, no era la primera opción (ni la segunda), pero al final fue el que dijo “sí” a una bomba de tiempo llamada Sevilla FC. Un club histórico, sí, pero que lleva años coqueteando con el desastre.
¿Por qué Almeyda y no Imanol?
Porque Imanol Alguacil dijo que no. Así de fácil. El técnico vasco era la gran apuesta del nuevo director deportivo, Antonio Cordón, pero no hubo química. En dos reuniones intentaron convencerlo —una con Víctor Orta y otra ya con Cordón— y aunque la oferta económica era jugosa (tres años de contrato y hasta cláusulas de salida), Imanol olió el humo del incendio y mejor se echó para atrás.
Ahí fue cuando entró en escena Matías Almeyda, que venía levantando la mano desde Grecia, donde dirigía al AEK. Cordón lo conocía de su etapa en Olympiacos y no lo dudó: “vámonos con el Pelado”.
¿Qué le espera a Almeyda en este Sevilla?
En una palabra: infierno.
El club no tiene dinero, le urge bajar la masa salarial un 40%, va a tener que vender a varios de sus mejores jugadores y no hay mucho margen para fichar. A eso súmale un vestidor golpeado, una afición harta y una directiva en modo supervivencia.
Ah, y siete entrenadores en las últimas tres temporadas. Sí, siete. Esto no es un club, es una ruleta rusa.
Aun así, Almeyda aceptó el reto. ¿Por qué? Porque tenía ganas de volver a España, porque le emociona la idea de reconstruir y porque, según dicen desde dentro, entendió perfectamente la situación y aún así quiso subirse al barco. Valiente, ingenuo o ambas.
¿Cuánto tiempo firmó y qué se sabe de su contrato?
Tres años de contrato, aunque con ventanas de salida al final de cada temporada. Va a ganar menos de lo que se le ofrecía a Imanol, lo cual también le viene bien al Sevilla, que está más endeudado que una tarjeta de crédito a final de quincena.
El fichaje de Almeyda también marca el primer gran movimiento de Antonio Cordón como nuevo director deportivo tras la salida de Víctor Orta, y es la prueba de que en Sevilla las decisiones se están tomando al vuelo.
¿Tiene experiencia Almeyda en Europa?
Poca, pero con buenos resultados. En Grecia le fue bastante bien con el AEK: campeón de Liga y Copa en 2023, lo cual no es poca cosa. Antes dirigió a River Plate (en el infierno de la B), a las Chivas de México (donde fue campeón), y al San Jose Earthquakes en la MLS (ahí no tanto).
Eso sí, en LaLiga será su primera vez como entrenador, aunque no como jugador…
¿Ya había estado Almeyda en el Sevilla?
Sí, y no fue precisamente un cuento de hadas. En 1996, cuando tenía solo 22 años, Sevilla pagó una fortuna por él (1.400 millones de pesetas… ¡una locura!). Pero su paso fue fugaz y amargo: el equipo descendió a Segunda y Almeyda no brilló. Fue una etapa de caos, con tres técnicos ese mismo año (Camacho, Bilardo y Julián Rubio) y un club en caída libre.
Después de eso, Matías se fue a Italia, donde tuvo una gran carrera: Lazio, Parma, Inter… ganó títulos y dejó huella. Pero en España, su historia había quedado inconclusa. Hasta ahora.
¿Qué puede aportar Matías Almeyda al Sevilla?
Carácter, intensidad y un estilo ofensivo que, cuando le sale, levanta equipos caídos. Lo hizo con Chivas, lo hizo con River. Le gustan los retos complicados. Sevilla lo es, y mucho.
Pero también es cierto que este no es un proyecto normal. Este Sevilla necesita un milagro disfrazado de entrenador. Almeyda no viene a un equipo hecho, viene a reconstruir con lo que haya, y eso incluye aceptar ventas, gestionar crisis internas y hacer rendir lo poco que tiene.
Entonces… ¿Almeyda es solución o parche?
Es una apuesta arriesgada, pero en este momento, es lo único que tenía el Sevilla. No es la solución mágica, pero es alguien que al menos quiso subirse al barco cuando otros se bajaron corriendo.
Tiene experiencia con equipos que tocan fondo, tiene hambre y ya conoce lo que es trabajar en condiciones difíciles. Ahora solo queda ver si eso alcanza para rescatar a un Sevilla que lleva años caminando al borde del abismo.
¿Final feliz o nuevo fracaso?
Eso lo dirá el tiempo. Por ahora, lo único claro es que Matías Almeyda ya está aquí, y la ciudad andaluza le vuelve a abrir la puerta, 28 años después.
Esperemos que esta vez, sí tenga final de película.
El tablero está preparado.
— Sevilla Fútbol Club (@SevillaFC) June 16, 2025
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